viernes, 30 de noviembre de 2018


Voy por la vida
Atado de manos y pies
Una mordaza auto impuesta
Me silencia y me asfixio

La cobardía
Me provoca una fiebre terrible
Que me hace delirar con sombras malvadas
 Que me arrancan de una pesadilla solo para empujarte  a la próxima

Ahora que sospecho el colapso del día
Se alargan las distancias Entre el amanecer
Y la parte de mí, que aburrido de esperarme  en la playa
 Va por el mar enfurecido, Saltando de ola en ola
Sin apenas detenerse  en su ardiente carrera hasta alcanzar el sol.

No hay comentarios: